Sandra Alonso está viviendo su temporada de eclosión en el pelotón femenino
Con grandes actuaciones en categorías inferiores, en este 2022 cambió de aires para fichar por el Ceratizit alemán, y llegó para ser una de sus líderes. La alicantina, que nació en México, «aunque con nueve meses ya estaba viviendo en Torrevieja», está respondiendo a la confianza. En la París-Roubaix, celebrada el pasado sábado, logró terminar décima: el mejor resultado de una española. Una prueba lejos de los moldes de la tradición nacional, en la que tampoco ningún español en la modalidad masculina ha logrado vencer en la historia, pero que desde ahora tendrá a una corredora fija en las próximas ediciones.
En la Roubaix asombró, porque ni la propia corredora era consciente de cuál era su límite en una carrera de este tipo, de las más duras del calendario. «Sabía que llegaba en buena forma, pero ufff… esto me da más motivación. Además, recibí muchos mensajes de otros ciclistas, como Perico Delgado, y eso ilusiona», resalta. Sandra Alonso compagina el ciclismo con sus estudios de Arquitectura Técnica: «No tiene nada que ver, pero me gusta y me sirve para desconectar».